De familia judeo conversa y toquero de profesión e hijo de Juan Álvarez de Toledo. Vecino de Sevilla (Andalucía / España) en la "collaçión de Omnium Sanctorum". Fue reconciliado por la Inquisición de dicha ciudad, en el castillo de Triana el 20 de octubre de 1.494, compareciendo por si y por su mujer, reconciliada, hija de Rodrigo de Porras, habilitándolo por la cantidad de 4.000 maravedís.