Denominación dentro del judaísmo que surgió como respuesta a las tendencias radicales del judaísmo reformista americano hacia finales del siglo XIX. Contra tales tendencias, Sabato Morais (1823 - 1897) y otros encabezaron una reacción conservadora que intentaba seguir una vía entre la ortodoxia y la reforma. Morais se convirtió en presidente del Seminario Teológico Judío de América, en Nueva York, donde todavía se forman los rabinos del movimiento. El objetivo del judaísmo conservador era permitir la adaptación al mundo moderno al mismo tiempo que se conservaba la legislación bíblica y talmúdica. Aceptaba la necesidad de considerar la creación y la práctica judía secular de modo crítico, pero mantenía que un judaísmo auténtico debe señalarse por la adhesión a la Toráh. Muy influyente fue también Solomón Schechter (1847 - 1914). Contribuyó a la evolución del judaísmo conservador en su deseo de sintetizar la enseñanza y el culto judío tradicional con las exigencias modernas. Esto ha significado, por ejemplo, que el hebreo se conserve en la liturgia, pero a las mujeres no se les exige estar separadas en una galería especial, recientemente, a pesar de alguna oposición, el movimiento ha aceptado la ordenación de mujeres. Aunque más fuerte en América, con un Seminario y cuerpo que elabora las normas de conducta llamado Asamblea Rabínica, la influencia del judaísmo conservador se ha extendido actualmente a Europa y también a Israel.