Uno de los primeros comerciantes extranjeros establecidos en Shanghai fue el judío sefardí David Sasson, natural de Bagdad / Irak, que había huidio a la India en busca de un lugar más amable con los judíos, y de ahí pasó a Shanghai, en 1845, donde creó un auténico emporio, con negocios bancarios y comerciales de todo tipo. Junto a los Sassoon, Kadoorie, Hardoon, que todavía hoy tienen importancia en Asia, las familias Ezra, Shamoon, Baroukh, Toeg, Abraham, Haim e Hillali representaban las personalidades más conspicuas de la sociedad internacional de Shanghai. En 1930 la Kehilhá sefardí de Shanghai está compusta por unos 700 miembros, pocos entre una población de 57.000 extranjeros, pero muy influyentes, dado que de los 99 miembros de la Bolsa, 38 eran judíos sefardíes. Fuentes: Merlos Sánchez, Tomás. Judíos en China. En Diáspora e itinerarios, en: Debats. Institució Alfons el Magnànim. Invierno 2009 / 1, número 103. Ejemplar coordinado por los profesores Fancesc Morató y Antonio Lastra. 122 páginas. Páginas 31 a 42.