El 15 de junio de 1445 comparecen ante el concejo de la ciudad de Murcia (España), Ysaque Bonjua, Ysaque Modur y Yuçaf Perhanus, judíos de la aljama de dicha ciudad, quienes en nombre de la aljama expusieron que vistas las dificultades que atravesaba la ciudad en servicios al rey y obligada a realizar ciertos pagos, se ofrecía a prestar al concejo 10.000 maravedíes. El concejo aceptó, y el 12 de julio del mismo año ya los había devuelto.