Najmanides Rambán Moshe Ben Najmán o Moses Gerondi o Najamaní o Rabénu Moses Gerondi. Nacido en Girona (Catalunya / España), en el año 1194 y falleció en el año 1270 en Eretz Israel. Fue la figura de más prestigio y categoría intelectual del grupo de cabalistas conocido como “círculo de Girona". Apodado “El león más grande en el redil de los leones”. Fue descendiente de Isaac ben Reuben, contemporáneo de Isaac ben Iaakov Alfasí. Su madre fue la hermana de Abraham, padre de Jona ben Abraham Gerondi. Fue discípulo de los célebres Talmudistas Meir ben Natan de Trinquetaille y de Yehuda ben Yakar, alumno de  Isaac ben Abraham de Dampierre, que había abierto una  Yeshiváh en Barcelona. Aprendió también filosofía y medicina. En él se unieron la sabiduría de la Toráh de los franceses, que poseían las Tosafot (agregados), con amplios estudios, conocimientos de idiomas, e investigación en filosofía y en las ciencias naturales. Entre sus maestros se contaron: Yehuda ben Yakar, alumno de  Isaac ben Abraham de Dampierre, que había abierto una  Yeshiváh en Barcelona. De temprana edad demostró poseer grandes cualidades para el estudio de la Toráh y a los 16 años ya conocía y dominaba todo el Talmud (2500 hojas aproximadamente) y sus comentarios. Siguió al principio la tradición de los tosafistas del norte de Francia, y luego de las Yeshivot de Provenza.  Su fama fue tal que se le llamó “Ab ha-Hokmanh” (Padre de la sabiduría). Su maestro fue el provenzal Yehudah ben Yaqar, con el que estudió en Barcelona (Catalunya), iniciándole en los principios de los tosafistas europeos. Meir ben Yishaq de Triquetaille le enseño las grandes tradiciones provenzales, y así por sus conocimientos Talmúdicos, se erigió en la cabeza del grupo o círculo de Girona. Al principio fue un convencido antirracionalista, en concreto de Maimónides, situándose claramente a favor de la mística y de la cabalá, pero a la vista de la intransigencia de los antimaimonideanos, defendió a Maimónides, teniendo al final una postura un tanto dudosa que oscilaba entre el maimonideísmo y el antimaimonideísmo. De profesión médico, se dedicó a la enseñanza. Rambán escribió sus comentarios de la Toráh después de haber sido uno de los más grandes educadores de su generación, autor de libros de Halajá y explicaciones en el Talmud Babilónico. Escribió el primero de los libros de Innovaciones “Innovaciones del Rambán”. Su comentario a la Toráh es la obra más popular después de la Rashí. Además de comentador, Talmudista y cabalista publicó diversos comentarios al Talmud de significativa importancia: Miljamót Hashém, Toráht ha-Adám, Séfer ha-Vikuaj. Dominaba todas las materias del judaísmo y la literatura de la Halajá y conoció todo lo que se escribió en esos campos, hasta su época, en la literatura de los Gaonitas, comentarios de Rashí, innovaciones de los escritores de las Tosafot y Poskim. Rambán basó sus comentarios de los Sabios de España, como los de Abraham Eben Ezra. Casi en todos los versículos trae acotaciones de los dos comentaristas, las aclara, las amplía, disiente con ellos y a veces se opone a ellos. Respecto a Rashí, el Rambán, los guardaba aprecio y gran respeto. La mayoría de sus comentarios son Masa – Umatan – Drisha vejakirá (explicaciones e investigaciones) sobre comentarios de Rashí a veces lo alaba y a veces amplía su comentario y aún agrega sobre él. Respecto a Eben Ezra, el Rambán lo criticó en forma violenta. En sus comentarios de Génesis IX, 2, dijo: “Estas palabras contradicen lo escrito, es prohibido pronunciarlas”. La grandeza de Eben Ezra no estaba en el Talmud y no se ocupó de la sabiduría de lo oculto (Cabalá), y por eso no apreció el Rambán, su comentario y lo niega muchas veces. Rambán fue fiel a la tradición de la Toráh Oral en la Halajá y en la Agadá, pero en sus comentarios agrega de la teoría de lo oculto (Cabalá) en la cual era un experto. El Rambán no se atiene como Rashí solo a las explicaciones del versículo sino que comenta enteramente el tema. El casi no se ocupa del aspecto gramático de las palabras, sino que trata los comentarios de la Halajá y la Agadá y explica las intenciones y, al igual que los filósofos, busca en sus comentarios el mensaje moral de las escrituras y explica los acontecimientos de nuestros antepasados como un símbolo para el futuro y agrega: “Los actos de los padres serán de señal para sus hijos”. Su estilo es sencillo y claro pero no reducido y condensado, como el estilo en el cual se destacaron Rashí y Utilizó el simbolismo cabalístico en algunos de sus piyyutim, y sus puntos de vista sobre el destino del alma después de la muerte y la naturaleza del mundo futuro, expresados en “Sa’ar ha’gemul” al final de su obra halájica “Toledót ‘Adam”, representan las ideas del llamado “circulo de Girona” y contrastan con las opiniones de Maimónides. No escribió obras específicamente sobre la cábala, aparte de un comentario sobre el “Sefer Yetzirah”, sólo sobre el primer capítulo, el cual fue publicado por G. Sholem en 1930, y un sermón con motivo de una boda. Fue médico de la corte de Jaime I de Aragón (1213-1276). A partir de 1264 fue Rabino mayor de Cataluña, representado al judaísmo ante los reyes de la Corona de Aragón, que le conocieron con el nombre de Bonastrug de Porta (Saporta). Ejerció una gran influencia sobre la vida judía de Cataluña, hasta tal punto que incluso el Rey Jaime I acostumbraba consultarlo. Intervino como protagonista principal en la disputa de Barcelona, por invitación directa del rey de Aragón Jaime I, frente al converso Pablo Cristiano. Por orden del obispo de Girona, escribió un resumen de la polémica, titulado Sefer ha-wikkuah (Libro de la discusión), que irritó tanto a los cristianos que tuvo que intervenir el rey, el cual consiguió liberar de alguna manera a Najmánides del juicio. Los dominicanos no satisfechos, procuraron la ayuda del papa Clemente  IV (1265 - 1268), que envió una carta al rey de Aragón solicitando la penalización de Najmánides. Rambán logró escapar de España y dirigirse a Eretz Israel. Arribó a Acco en el verano de 1267 y luego a Jerusalén. En una famosa carta a su hijo Najmán, describe las ruinas de la ciudad. Con su llegada a la ciudad organizó una sinagoga. En su Comentario al Libro de Job, expone la doctrina cabalista de la trasmigración de las almas. Sobre cuestiones cabalísticas escribió: Comentario al Sefer Yesirah, Osar ha-hayyim (El tesoro de la vida), Saare ha-gemul (Las puertas de la recompensa), Derasah (Investigación), Sidre ha-yesua (Órdenes de la salud), Sefer ha-emuna we ha-bittahón (El libro de la verdad y de la esperanza), Edén Elohim (Paraíso de D’s), Soan sodot (El libro de los secretos), Sefer ha-qes (El libro del fin); de carácter moral: Toráh ha-adam (La ley del hombre), en que expone normas para conducirse en las enfermedades, muerte, tristeza, etc, Sulhán arba (Mesa cuadrada) en que se dan una serie de reglas para la buena educación en la mesa, Tapuhe zahab (Manzana de oro), Sefer ha-zakt (Libro de la pureza), obra dirigida a su hijo Salomón, alto funcionario de  la corte y en la que ensalza la pureza de la vida y le recomienda la lectura de la Toráh, Iggeret ha-qodes (Epístola sobre la santidad), Iggeret ha-musar (Epístola de la admonición) sobre la educación de los hijos; sobre Maimónides: Iggeret ha-hemdah (Epístola del deseo) en que defiende a Maimónides frente a los Rabinos franceses; sobre derecho: Milhamot Adonay (Las guerras del Señor); asimismo escribió una colección de poemas de gran calidad. Todo su trabajo denota su original personalidad, síntesis de la cultura de España y la devoción de Alemania, una educación Talmudica junto a conocimientos de Cabalá así como un amplio conocimiento de las ciencias y la teología cristiana). Una de sus obras fundamentales fue su comentario a la Toráh que refleja su visión de D´s, la Toráh, Israel y el mundo. Si bien tuvo en gran estima a Rashí, polemizó con parte de su obra así como con parte de las postulaciones del Rambám en la Guía de los Perplejos. Su comentario a la Toráh fue impreso por primera vez en Roma en 1480. Sus obras halájicas son consideradas junto a sus comentarios del Talmud como la cima de la creación de su época en España, desarrollando en ellas un nuevo estilo de estudio que profundiza la comprensión del Talmud no sólo en su aspecto legal, teniendo una gran influencia en las generaciones siguientes. Uno de sus discípulos más famosos fue Rashbáh.