Vivió en Toledo (Castilla-La Mancha / España), aunque su nombre (que es en árabe Abu Ishaq b. Abu-l-Hasan Benyamin al-Bargeloni) indica que su familia procedía de Barcelona. Fue personaje destacado en la administración económica castellana en tiempo del rey Sancho IV “el bravo”, de Castilla, hijo de Alfonso X (1284-1295). Su nombre aparece por primera vez en los libros de la Cancillería real de 1284, significando la vuelta de los judíos toledanos a las posiciones influyentes tras los encarcelamientos de los últimos años del reinado de Alfonso X. Se le encargaría en un principio de pagar el salario a los caballeros y personal de la corte, y otros asuntos de menor importancia. Estuvo especialmente unido al Conde Don Lope de Haro, gracias al cual el Rey le firmaría en 1287 un contrato por el que se le arrendaban por dos años el derecho de acuñar moneda de oro, la recaudación de impuestos de los judíos, las multas y otros importantes derechos. Se le encomendó asimismo devolver a la corona territorios que habían sido enajenados, por lo que su firma aparece en hebreo en documentos de aquellos años firmados por el propio rey. La caída en desgracia y posterior ejecución de Don Lope de Haro no parece haber cortado su carrera. El día 25 de diciembre de 1288, Sancho IV el Bravo, rey de Castilla y de León (1284 - 1295), le arrienda las rentas y los derechos del reino (los almoxerifagos), según los tenía arrendados don Mosé Abudarham y en ese momento recaudaba don Mosé Abenturiel, por un plazo que se inicia el 15 de enero de 1288 y hasta dos años cumplidos, en 140.000 maravedíes de la moneda blanca de la primera guerra. En 1290 arrienda de nuevo, junto con el poeta y cortesano toledano Todros ben Yehudah ha-Leví, el derecho a reclamar para la corona territorios enajenados.